Informe muestra un panorama de los maestros en México: la mayoría considera que el sector público no cuenta con los recursos necesarios 
El estudio realizado por Fundación SM deja ver que los docentes aspiran a mejorar la sociedad, al mismo tiempo reconocen que en la pospandemia sienten agotamiento.
- Redacción AN / HG

Por Héctor González
“Ningún sistema educativo puede ser mejor que sus profesores”, apuntó en 2007 el primer informe McKinsey sobre sistemas educativos. Consciente de la conclusión y por tanto de la importancia de conocer a fondo cómo viven los docentes su vida profesional y laboral, Fundación SM, a través de su programa Observatorio de la Escuela en Iberoamérica realizó el Informe el Profesorado en México.
Cecilia Espinosa, directora de Fundación SM México, explica que estudios similares se realizaron en España, Chile y Brasil, “la investigación nos dio un panorama de cómo están los maestros en aspectos como su desarrollo profesional, su bienestar docente o vocación”.
La especialista califica de positivos y esperanzadores los resultados obtenidos, “preguntamos a los maestros por qué eligen esta profesión y vimos que 72 por ciento respondió porque quieren mejorar la enseñanza (24%), la sociedad (25%) o por vocación (23%), es una respuesta fabulosa porque nos deja ver su compromiso”.
Otros de los resultados obtenidos por el documento apuntan que el porcentaje de profesores que se siente libre de utilizar sus propios materiales es de 97% mientras que 69% considera que en la enseñanza pública no cuentan con los recursos y apoyo necesarios para llevar a cabo su trabajo.
Ante el cuestionamiento sobre lo que necesitan para mejorar profesionalmente, 58% respondió formación, actualizar conocimientos y un mejor salario. “Sabemos que en nuestro sistema educativo constantemente hay reformas y cambios, y un profesor que no está en un proceso de actualización es muy difícil que pueda responder a los cambios que exige la profesión”, precisa Cecilia Espinosa.
Al hablar de su estado anímico, 91% dice que a pesar de los problemas se esfuerzan y están ilusionados. El 73% de los profesores de primaria dice que no cambiaría su profesión, mientras que en secundaria el porcentaje baja a 49%. No obstante, el documento también detalla que mientras dos de cada cinco maestros se sienten valorados socialmente, uno de cada tres se siente valorado por sus autoridades administrativas.
Alcances y retos
Cecilia Espinosa reconoce que la profesión ha cambiado notablemente en los últimos años y en particular después de la pandemia. “Cuando hablamos del bienestar o malestar del docente constatamos que muchos sienten un gran agotamiento físico, particularmente ahora en la pospandemia. El asunto es más dramático en las mujeres porque además de su profesión tienen que atender el hogar. Los daños se acentúan más en el sector público y entre los profesores con más antigüedad”.
Entre las cuestiones que les representan más dificultad en el desarrollo de su tarea están cumplir con las exigencias administrativas y gestionar el tiempo para cumplir con la programación. Al respecto, sus principales fuentes de estrés de la labor son el excesivo trabajo administrativo, tener demasiado que corregir y no contar con un salario acorde con su educación y dedicación.
“Muchos maestros no tenían las herramientas básicas de la tecnología durante la pandemia tuvieron que improvisar y aprender de inmediato, eso les impactó mucho en cuestión de estrés. Los más preocupados por el uso de las tecnologías son los maestros más grandes. Hay una brecha generacional tremenda”.
La directora de Fundación SM adelanta que por ahora tienen la intención de difundir los resultados del informe en varios niveles. “Tendremos mesas de reflexión en universidades y encuentros. El estudio abarca niveles de preescolar, primaria y secundarias tanto públicas como privadas. Nos interesa que sea conocido por las autoridades educativas para que tenga impacto en las políticas públicas”.