Descubre INAH antiguas chinampas en obras del trolebús en Chalco | Fotos 
Es posible que estos elementos sean precursores de las chinampas posclásicas ya que, de acuerdo con la estratigrafía y los materiales arqueológicos, anteceden al período Epiclásico.
- Redacción AN / OR

Al oriente del Estado de México fueron localizados vestigios de un canal y de dos sistemas constructivos de terraplenes lacustres prehispánicos, que habrían formado parte de antiguas chinampas, dieron a conocer arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Los especialistas detallaron que al excavar diversos pozos de sondeo definieron una secuencia estratigráfica y temporal que incluye cuatro contextos en profundidades cada vez mayores, siendo los dos primeros un apisonado de fines del siglo XX y otro que, dada su evidencia material, retrocede de los siglos XIX al XVI.
Los dos contextos prehispánicos son, en primera instancia, una capa transicional de tipo lacustre-planicie que se remonta al periodo Epiclásico del oriente del Estado de México (650-900 d.C.); y finalmente, uno más temprano que estaría asociado con las citadas chinampas.
Joshué Baal Soto Vargas, arqueólogo que participa en las labores del salvamento adscrito al Centro INAH Estado de México dijo que el canal antiguo encontrado, se ubica a 3.26 metros de profundidad respecto a la superficie actual; además, está orientado en dirección norte-sur, tiene un ancho de 1.10 metros y una altura que oscila entre los 65 y los 70 centímetros.
El especialista, al referirse a los terraplenes lacustres hallados señaló que estos debieron ser construidos sobre el lecho del lago de Chalco, probablemente en una época de estiaje que permitió acceder a los niveles más bajos del cuerpo de agua.
“Los terraplenes estuvieron compuestos por varios depósitos colocados unos sobre otros. Los primeros tres formaron la base de estos sistemas constructivos lacustres, a manera de hormigón, pero también como filtrantes de nutrientes y oxígeno para el cultivo, que pudo haberse llevado a cabo en las capas superiores”.
El INAH explicó que sobre estas tres capas inferiores, se dispuso una primera cobertura limo-arcillosa de color café rojizo, misma que fue elevada con el paso del tiempo, probablemente como consecuencia de las fluctuaciones del lago, creando así el registro de dos momentos constructivos más del terraplén.
“Es posible que estos elementos sean precursores de las chinampas posclásicas ya que, de acuerdo con la estratigrafía y los materiales arqueológicos, anteceden al periodo Epiclásico”.
Baal Soto abundó que los materiales asociados a las capas estratigráficas incluyen navajillas prismáticas de obsidiana verde de Pachuca, restos paleobotánicos (semillas) y huesos de animales pequeños sobre los que se conducirán mayores exámenes para obtener información.
En el lugar de estudio fue localizado un tronco de madera delgado colocado en posición vertical, es similar a como se instalan hasta hoy los pilotes de cimentación de una chinampa, ya que atraviesa todas sus capas hasta llegar a la base natural lacustre.
El artefacto mide 1.45 metros de largo con un diámetro máximo de ocho centímetros, tiene una inclinación hacia el oeste y una característica especialmente relevante en él, “es que sus dos extremos fueron trabajados de modo a que están rematados en punta”, finaliza el especialista.
Dicho hallazgo, en los límites de los municipios de Chalco de Díaz Covarrubias y Valle de Chalco Solidaridad, fue registrado entre los pasados meses de mayo y julio y tuvo lugar durante la supervisión de las acciones de salvamento arqueológico, que la Secretaría de Cultura federal, a través del Centro INAH Estado de México, brinda a una obra supeditada a la construcción del trolebús Chalco-Santa Martha y de la estación Oriente 50, que formará parte de este medio de transporte.
Hasta finales de junio el INAH no había reportado evidencias pretéritas relevantes en el lugar es hasta el día de hoy que da cuenta de los relevantes hallazgos.
Las exploraciones de salvamento arqueológico están aún pendientes en los espacios que ocuparán los andenes de la estación Oriente 50 del trolebús, dijo el INAH; su ejecución permitirá recuperar y analizar más datos, en conjunto con centros de estudio, como el Laboratorio de Etnobotánica de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), acerca de la función y la temporalidad de todas las estructuras descubiertas.